“Limpiar paredes: El rodeo vertical que no pediste”
- Melani

- 6 oct
- 2 Min. de lectura

Por BIS Nin Texas — Limpiamos como leyendas. Tú vives como una.
Las paredes: testigos silenciosos de tu vida. Han visto tus pasos de baile, tus visitas nocturnas al refrigerador y ese intento fallido de colgar una repisa que terminó en “decoración por accidente”. Pero cuando llega el momento de limpiarlas… prepárate para un rodeo vertical. Y en Texas, se limpia con altura y con carácter.
Escena 1: La Mancha Misteriosa
La ves. Justo al lado del interruptor. ¿Chocolate? ¿Crayón? ¿Salsa BBQ? La hueles. Te arrepientes. La limpias. Se esparce. Entras en pánico.
“Esta pared ha vivido más que mi historial amoroso.”
Escena 2: El Festival de Huellitas
Pensabas que tus paredes eran blancas. Resulta que son beige… con un patrón de pequeñas manos. Agarras la esponja y limpias como si borraras evidencia.
“No tengo hijos. Entonces… ¿de quién son estas manos?”
Escena 3: El Enfrentamiento con Telarañas
Miras hacia arriba. Una telaraña te saluda desde la esquina como si pagara renta. Tomas la escoba. Fallas. Lo intentas de nuevo. Golpeas el ventilador. Caos total.
“Vine a limpiar. Me quedé por la batalla aérea.”
Escena 4: El Ataque Artístico
Encuentras una pared con “expresión creativa” cortesía de marcadores, stickers y una explosión de brillantina. Friegas. Raspas. Cuestionas tus decisiones de vida.
“Esto no es una pared. Es un mural de destrucción infantil.”
Escena 5: El Final Brillante
Finalmente limpias la última sección. Te alejas. La pared brilla. Flexionas los brazos. Enciendes una vela. Susurras: “Texas fuerte.”
“No solo limpié una pared. Conquisté un monumento.”
Reflexión final:
Limpiar paredes es el héroe olvidado del mantenimiento del hogar. Es parte detective, parte entrenamiento de brazos y 100% coraje texano. Ya sea manchas misteriosas, combate contra telarañas o guerra de stickers, lo enfrentas con valentía, limpiador y un poco de actitud.
Y si tus paredes empiezan a parecer una pintura de Jackson Pollock en crisis, BIS Nin Texas está listo para entrar con guantes, fuerza y brillo legendario.




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